El Tamaño Importa? Sí, Zoquete, Importa!!!

No me voy a andar con rodeos: El tamaño del pene importa. No le pidan a la Rampolla que lo diga, pero el resto de nosotras lo sabemos: el tamaño del pene importa.
Empecemos por lo básico: los extremos nunca son buenos. Un pene demasiado chico no te calienta ni un poco, no lo sentís cuando está adentro ("ah, ya entraste?"), durante el ejercicio de algunas posiciones se sale y calculo que un preservativo standard debe ser una gigantesca bolsa de papas. Para ustedes, “pitufos”, lo mejor habría sido vivir en la antigua Grecia, donde se veneraban los penes chicos y firmes y a los grandotes se los consideraba “poco estéticos”.
Y un pene demasiado grande también tiene sus problemas; No tuve la suerte de cruzarme con ningún superdotado en mi vida (snif, snif... ¿Alguien en la audiencia...?) pero si me hablan de un pene con el grosor de una lata de energizante V guaraná, lo primero que pienso es "pero eso me entra??????", lo segundo es: "Y si... como entrar, entra... pero qué dolor!!!" y ahí se me cayó la libido. Aparte, el manejo de semejante miembro debe ser dificultoso y los preservativos standard le deben quedar tan ajustados como a mi un talle 1.
Como segundo paso, derribemos un mito: Basta de tipos que dicen tenerla laaaaaarga como una manguera de camión autobomba. A ustedes, amantes de la hipérbole, les tengo una noticia: lo importante no es el largo, sino el grosor. Sí, sí, sí, como lo leyeron: No nos interesa que la tengan de 30 centímetros, nos importa cuantas vueltas le podamos dar con el centímetro. Si no entienden esto, les recomiendo una buena clase de anatomía femenina (con tono de Santo Biasatti: Ooooootro post).
Y en tercer lugar, hay que saber usar lo que se tiene. Un pene de semental equino puede ganarte el respeto de tus congéneres en el baño del colegio pero talvez no sea una bendición en la cama y un pene chico puede ser fácilmente olvidado si se compensa con otras dotes amatorias. Y si no, hay una amplia gama de consoladores, vibradores y desarrolladores en el amplio mercado de los sexshop.
O sea que con un pene normalucho estamos bien. Si puede venir un poquito por encima del promedio, no nos vamos a quejar tampoco, pero para aquellos de ustedes que caen en la categoría de "normaloides", esta todo bien. Y para quienes entren en la categoría de "pitufos" o "Titanes": no desesperen, una se adapta. Entendemos que ninguno de ustedes, señores, tuvo la opción de elegir qué pene quería. O todos la tendrían gigante y la venta de lubricantes íntimos sería todo un negoción...